PIENSA ANTES DE ACTUAR

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La Agencia Española de Protección de Datos sancionó con 1.000 euros a un trabajador por compartir mediante la aplicación WhatsApp datos personales de un compañero de trabajo sin su consentimiento.

Según el reclamante, el trabajador difundió tales datos como su nombre, apellidos, DNI, antigüedad, fecha de nacimiento y filiación sindical. Junto a la reclamación, el perjudicado aportó un documento divulgado con los datos difundidos en dicho grupo de WhatsApp y un archivo audiovisual donde probaba dicha infracción.

Fuente

Todos sabemos que la protección de datos personales tarta sobre el control de la información presente en cualquier soporte que permita su utilización, almacenamiento, organización y acceso. No obstante, a veces no somos conscientes de la importancia de este hecho y la seriedad de divulgar información personal de otros sin el consentimiento expreso de dicha persona.

Si alguien publica datos personales de una persona en internet, no solo no respeta la privacidad de dicha persona sino que también ayuda a que terceros hagan uso de esa información y la utilicen para actividades delictivas. Sin embargo, hay casos en los que no somos conscientes de que estamos incumpliendo la privacidad de datos. Por ejemplo, cuando tienes un blog y pones el nombre y el apellido del amigo con el que te has ido de viaje o cuando publicas un estado donde felicitas a un conocido.

Así que antes de publicar nada, pregúntate si a la persona de la que estás hablando le gustaría que su nombre, su cumpleaños o su domicilio estuvieran al alcance de cualquier persona que tuviera acceso a internet. (Truco: siempre puedes preguntar a dicha persona si le parece bien que publiques sobre ella).

Piensa antes de actuar.

Lía Paraíso